Durante los años de la guerra de Siria, Rojava (norte del país), controlada por los kurdos desde el 2012. Fue el rincón más seguro y casi intacto del país. Esta zona frontera con Turquía acogió a más de un millón de personas desplazadas de diferentes etnias y religiones de otras parte de Siria, donde vivían en paz y seguridad a pesar de las amenazas del presidente turco de invadir la zona y acabar con la revolución feminista liderada por mujeres. Erdogan logró ocupar una parte de este territorio (Afrin) en 2018 y otra el pasado mes de octubre.

¿Qué será de este territorio en el futuro?

¿Por qué Erdogan logra acabar con sus planes?

¿Cuál es el papel de la comunidad internacional y la sociedad civil?

Amina Hussein: Periodista y traductora kurda residente en Barcelona. Ha colaborado en varios medios catalanes, kurdos y árabes. Especialista en temas del Kurdistán y de las mujeres.

Documental "Armonías para después de la guerra": La música no termina con la guerra, pero ayuda a exorcizarla. El Kurdistán sirio quedó destruido a causa de largos años de guerra; sobre aquellas ruinas, sin embargo, músicos, poetas, profesores y decenas de niñas y niños vuelven a tocar instrumentos.

Entrada libre hasta completar aforo

Donostiako Udaleko lankidetza Atala / Giza Eskubideen Zinemaldia

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